`Nuestra responsabilidad de comprender
lo que los calendarios mayas anticipaban
para la actual era que
habitamos´.
Por J.E.Franco
El período de hoy vivimos, traerá
consigo serias transformaciones en nuestra realidad, trabajo, familia, Salud,
Economía u objetivos de carácter espiritual, si es que antes no los teníamos
presentes en nuestras vidas, a nivel individual –primeramente– para
posteriormente reflejarse a nivel comunitario.
Estos meses, y los subsecuentes,
traerían como consecuencia, cambios en las estructuras de nuestras realidades,
que nos obligarán a confrontar lo que se levanta delante de nosotros, y a poner
en duda la validez y solidez de las estructuras sociales o de cualquier índole,
sobre las que antes construimos y dimos sentido a nuestra existencia. Los
intereses y objetivos materiales traen –finalmente– sólo división y duda, creando un
despliegue de conflictos y diferencias que no hacen más que separarnos, y
generar problemas relacionados con violencia, inseguridad, caos y pobreza.
Concluir o cerrar ciclos, o
comenzar de nuevo desde el principio, parecerá ser una circunstancia
atemorizante, pero es una oportunidad que se nos brinda para diseñar conscientemente puntos de inflexión y reencontrar o retomar Misiones de Vida que
alguna vez llegaron a nosotros, y que ignoramos o dejamos pasar, por
mantenernos en sintonía con la vibración energética de naturaleza material.
Como hemos escrito en notas
anteriores, la clave, el secreto,
desdibujado desde hace siglos por las culturas prehispánicas antiguas, es
responsabilizarnos de nuestros personales procesos de toma de Consciencia, y
comprender que cada acto que realizamos de manera individual y consciente, trae
consigo una consecuencia, cuya vibración energética se proyecta más allá de la
simple e inmediata realidad que vivimos día a día.
Imagen que acompaña a nota, tomada de la liga:
Escucho:
Driving | Everything but the Girl
Everything to lose | Dido
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