`Cuando la Soledad y el Dolor
lo pueden más, busco en mi interior
lo pueden más, busco en mi interior
Fortaleza y Guía´.
El mensaje compartido en tres partes, fue producto de varios esfuerzos
por comprender la situación de Salud que vivimos a escala tanto local,
como global, derivado del desarrollo de la Enfermedad COVID-19. El
primer mensaje que publiqué al respecto, notas atrás, fue resultado de una
serie de noches en profunda meditación, donde pude acceder a información, donde
comprendí en parte, la naturaleza del virus que genera la Enfermedad, y
su objetivo o misión dentro de la Naturaleza,
incluyéndonos, como seres humanos.
El mensaje que comparto ahora, es producto de canalizaciones en
forma, a las cuales se integran visualizaciones e información arribada por
meditaciones secundarias. El mensaje íntegro llegó en tres cortas partes, que
respondieron a las preguntas que realicé, sobre lo que nos depara en el
presente inmediato aún en la Contingencia que vivimos, y la lección o
aprendizaje implícito en la serie de circunstancias que nos rodean desde meses
atrás.
Me tomé el tiempo para trabajar cada corta parte, y desarrollarla de
manera clara y consistente, intentando explicar aspectos que quizá el
lector no entendería si se leyera cada parte en breve, tal y como arribó.
La parte primera, se centra en el concepto de pérdida de Salud,
y de Muerte.
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Canalización del Domingo 12 de Abril de 2020.
Primera Parte, de Tres.
La Muerte.
La situación proseguirá, a pesar de las medidas de Contingencia asumidas.
Los casos de personas infectadas continuarán, como naturaleza que define al
virus. La Enfermedad prosigue su avance, hiriendo y debilitando aún más, a
través del Dolor, la Pena y la Impotencia.
El virus, como cualquier elemento vivo, posee en su estructura
molecular, fragmentos de Luz, de Consciencia, que involucran una
meta, una Misión que cumplir, dentro de su interactuar en la Naturaleza.
Una vez que la cumpla, su existencia física reducirá al mínimo, su influencia. Sufrir
la Enfermedad es la lección a enfrentar. Como variable del contexto
natural, y humano, el objetivo del virus es poner en entredicho nuestro valor
de Estabilidad. Experimentar lo opuesto a la Salud y el Bienestar. Su
papel radica en polarizar, es decir, en hacer énfasis en el desequilibrio de la
Salud. Es esencial conciliar los contrarios, es lo que compete a la
Naturaleza, ya que el Equilibrio natural se ha roto desde décadas atrás,
por la influencia y la mano del Hombre. Se trata de despertar a la
Generosidad y lograr la Purificación interna, a través de la Vulnerabilidad, la
Resistencia y la Fe. Tres grandes valores que pueden ayudarnos a enfrentar
la situación que vivimos, a través de procesos donde nuestro pensamiento,
raciocinio y perspectiva de comprensión del Mundo, requieren de una profunda y
radical revisión, para transformar desde nuestro interior, la forma en que
reaccionamos frente a la realidad que hemos creado al paso de los años.
La Muerte es una experiencia natural, que, como seres humanos,
hemos estigmatizado y derogado de nuestro lenguaje cotidiano. Tememos morir, a
pesar de ser un paso necesario en nuestra existencia terrenal.
Los Planes de Vida que hemos diseñado antes de venir a la Tierra,
involucran no sólo hechos individuales y grupales familiares, sino que,
analizados a profundidad y en conjunto, integran acciones y eventualidades de
escalas mayores, como la realidad que ahora experimentamos. Frente a la
Muerte, lo único que puede ofrecerse es Compasión. Es una de las lecciones
que el virus que nos invade trae consigo en su estructura molecular.
Comprender la Muerte siempre ha sido tormentoso para la Humanidad.
Han sido necesarias grandes eventualidades humanas catastróficas, para afrontar
la Muerte como un proceso de búsqueda y Aprendizaje en nuestra Historia
como sociedades, como despertar de Consciencia.
La primera vez que me enfrenté a la Muerte, dentro de los Planes de
Vida, fue cuando aún impartía clases en la Universidad, a un grupo peculiar de
estudiantes, desarrollando todos sus miembros una empatía y unión inusuales y
profundas. En un accidente automovilístico, donde cuatro de ellos viajaban, dos
de sus miembros perdieron la vida. Fue devastador, como tutor del grupo y
catedrático de más de dos años de compañía académica y personal, afrontar tal
pérdida, no sólo para mí, sino para el resto del grupo, y qué decir de las
autoridades, quienes no supieron cómo reaccionar al respecto.
En ese momento, me fue revelado por vez primera, el concepto de Plan
de Vida.
Los dos estudiantes fallecidos habían designado en sus respectivas
Líneas de Vida, ese accidente que los llevaría a morir, no sólo como Solidaridad
entre ellos dos, sino como reto y prueba para sus compañeros, y para marcar
profundamente y de por Vida, nuestros corazones.
La perspectiva personal y grupal se modificó del todo, y su pérdida
sólo nos hizo más conscientes de nuestra responsabilidad, y el compromiso de
nuestros actos, llevando dentro de nosotros, los valores que ellos dos legaron,
con su compañía, amistad y valor humano.
Puedo asegurar ahora que, su pérdida, marcó mi propia Línea de Vida,
iniciando el tránsito paulatino que, años después del hecho, me llevaría a
abandonar las aulas y la actividad profesional como Arquitecto, para
consolidar mi Vocación como Sanador, y mantener aún hoy en día, contacto
con los miembros del grupo sobreviviente, en una estrechísima amistad que trasciende
las fronteras del Espacio y el Tiempo. ¡Cuántos de ellos dieron
vuelcos a sus vidas a partir de la pérdida de dos de los hombres más honestos e
íntegros que conocí siendo profesor de aula universitaria!
A escala global, las personas han integrado a sus Planes de Vida
sociales, la pérdida de la Vida como finales de sus trayectos, para enseñarnos
a escalas mayores, el valor de la Muerte, traducida como aspiración a la Vida.
Las circunstancias adversas que enfrentamos, son un camino en el que podemos
decidir encontrar respuestas, mejores caminos de Coexistencia y Armonía
con la Realidad general, y con nuestras millones de realidades individuales. La
Muerte es experimentada en escala mayor, mundial, haciéndose más palpable su
peso, para enfatizar aún más el valor de los esfuerzos por valorar, por
proteger, y alentar la Vida, de una manera equilibrada, congruente y compasiva.
Es lo que llamamos Compasión, valor humano que comienza con
nosotros mismos, siento auto compasivos, es decir, brindarnos la oportunidad de
sufrir la pérdida de nuestra Comodidad, Estabilidad y Bienestar, para invertir
en nuestros mejores sentimientos, valores y emociones, puestos al servicio de
quienes amamos, de quienes nos rodean y nos necesitan.
Darnos el tiempo para entendernos en las circunstancias más oscuras,
tristes y adversas, y encontrar en ese sitio, nuestros peores defectos, aceptarlos,
y trabajar con ahínco para transformarlos en nuestras cualidades esenciales
desde la más profunda consciencia y comprensión, cualidades que harán de
nosotros, destinos de Éxito, Plenitud y Apoyo para quienes nos rodean.
Situaciones como la actual, deroga las diferencias totales que nos
separan en todos los niveles y escalas, y nos convierten en una única raza,
invadida por un conflicto de Salud que ataca a todos por igual, sin importar
credo, religión, idiosincrasia, pensamiento, nacionalidad, condición económica
o preferencia sexual, por mencionar algunas.
Ante la Muerte, la ajena, la cercana o el riesgo de la propia, la
Compasión es la única respuesta, el destino último al que todos nos dirigimos,
frente a cualquier circunstancia o condición, no sólo a la adversa, la drástica
o final, como estamos acostumbrados, sino como una cualidad humana innata y
natural, en todos los aspectos de nuestras vidas.
La Compasión, entendida como el derivado de la Aceptación de la
Realidad distópica, del Amor a quienes están cerca de nosotros, pero
también de aquellos que son como nosotros, y cuyas realidades distantes y
distintas, reflejan el mismo Dolor, Sufrimiento, Alegría y
Aspiración de Vida, sin importar las variables que nos hagan
aparentemente lejanos y opuestos.
Frente a la Pérdida de todo, lo único que queda es la Aceptación, la
decisión de ser compasivos, de ser verdaderamente, humanos.
Imagen editada digitalmente, original, tomada de la liga:
Escucho:
Pern | Yann Tiersen
Broken-Hearted Girl | Beyoncé
Blessèd | Nerina Pallot
The conjuring of Anke | Thom Yorke
I´m the one | Candy Dulfer
Gracias, siempre es reconfortante leerte, feliz día 🌷🌷🌷
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